29 de noviembre de 2012

3

Entonces voy a terapia. Y vomito todo. Hay que decir lo que es real y que a veces se me olvida: yo no tengo ninguna patología que me impida un embarazo aunque el entorno de concebir a mi bebé sea en un ambiente médico y controlado.
No estoy enferma. Sólo quiero embarazarme.
 El entorno incluye: inyecciones de hormonas (en una dosis baja, hay que aclararlo), ecografías de control, un donante, la inseminación. Pero también incluye: un cuerpo (el mío) que responde bien a la estimulación, ovarios que funcionan, un útero y, por sobre todas las cosas, incluye el amor de nosotros dos.
El entorno lo incluye a él. 

19 de noviembre de 2012

2

Entro con mi vestidito de verano floreado. Me siento bien, tranquila, sin apremios. -¿Cómo vamos? ¿Sentiste algo con la medicación?
-Sí... no sé... normal.
Me recuesto en la camilla dispuesta a que me haga la ecografía trasvaginal. Como si fuera cosa de todos los días. Él se dispone a comenzar. -En realidad... siento que todo está trabajando...-le digo.
-¡Y cómo está trabajando! ¡Qué lindo está esto!
Su comentario me hace reir.
-¿Te dije ya que tenés unos ovarios hermosos? Tres óvulos generaste.
-¿TRES?
-Sí, a ver si hay un cuarto....cancelo todo... no, tenés tres, mirá.
Me muestra la imagen y efectivamente los veo. Tres bolitas negras.
-Bueno -me dice apagando la máquina. -Cambiate tranquila que tenemos que analizar los pros y los contras.
Me cambio un poco nerviosa. Salgo de a salita y me siento frente a su escritorio. Saca su libreta y empieza a anotar.
-Vamos por partes. Ovulás bárbaro. Respondés muy bien a la estimulación. A los ovarios les doy un diez.
-Ajá.
-Pero hay una segunda cuestión: el útero. El Clomifeno que tomaste, a algunas mujeres les afecta el tejido endometrial. Ayuda a los ovarios pero disminuye el endometrio. El útero está en un 5, digamos. Podría estar mejor, más mullidito.
Lo miro preocupada.
-No es para que te preocupes. Es algo del Clomifeno, no tuyo. Con la otra droga esto se arregla en un 100%.
-¿Entonces?
-Hay un tercer factor: tenés tres óvulos y sos joven. Hay posibilidad de embarazo múltiple.
-¿Pueden salir los tres?
-Y...
-...
-Estás en un siete, digamos. Y yo querría que para el primer intento estés en un 9 o 10. Si tu marido tuviera semen fresco que procesamos nosotros te haría la inseminación. Si fuera tu cuarto intento, también. Pero es el primer intento y con semen de un banco...
-...
-Yo saco en limpio dos cosas: una que te estimulás bárbaro y la otra que tenemos que usar la otra droga inyectable, pero en dosis bajas, de modo que podamos medir cuantos óvulos queremos.
-Entonces... ¿hay que dejar pasar este ciclo?
-Sí, te voy a dar anticonceptivos porque quiero que los ovarios descansen.

Me voy. Salgo a la calle como atontada. No sé qué hacer. Lo llamo a él, le explico. Nos quedamos hablando inusualmente un tiempo largo en el celular. Camino mientras le hablo sin un rumbo fijo. No sé para donde ir. Me siento como una mamá polla que no sabe qué hacer con sus tres huevos.

12 de noviembre de 2012

1

¡Empezamos!
El doc nos abre la puerta de su consultorio acompañado por una médica joven que al parecer estuvo en la intervención quirúrgica de julio.
-¿Cómo va, Madame? -me dice.
-Tengo algo para vos - le digo. Y le alcanzo la anatomía patológica que fui a buscar a la Clínica hace como dos meses. (Tomar nota de mi negación a querer ir a buscar ese papelito donde se detallan las cosas que me sacaron de adentro.)
-Ah, bien - me dice. Y abre el sobre. Lo mira, anota algunas cosas y de pronto se sorprende.
-¿Y esto?- se lo muestra a la joven médica que mira también sorprendida.
-No puede ser.
-¿Tenía focos?
-No.
Nosotros paramos la oreja. Me muero por preguntar qué es lo sorprendente pero enseguida pienso que ya fue, me lo sacó, qué importa lo que me sacó. Ya no está en mi organismo. A la mierda con eso.
-Bueno, estamos listos, ¿entonces?
-¡Sí! - decimos al unísono.
-¿En qué día de la menstruación estás?
-Cuarto día.
-Bueno, entonces vamos a mirar como estás -me dice. -Vamos a hacerte una ecografía.
La joven médica me hace pasar a un cuartito pequeñito donde hay una camilla y está el ecógrafo. Me da una bata y se va. Es muy dulce y suave. Le digo que estoy con pérdidas. Me dice que no importa. Me desvisto, les aviso, ella me ayuda a recostarme en la canilla y comienza con la ecografía. El doc aparece detrás y mira la imagen.
-¿A ver acá?... Bien... y acá... sí... ahí se ve clarito la cirugía...
Por mi mente pasan todas imágenes espantosas. Mi mayor miedo en este momento es que hayan aparecido nuevos quistes, un mioma nuevo, algo.
-¿Cuándo te operamos?
-En julio.
-Julio... -dice mientras lo veo que se va a la otra sala. Algo le dice a él que no logro distinguir bien.
La joven médica termina con la ecografía.
Me cambio otra vez. Paso a la otra salita
-¿Tenés ácido fólico en casa?
El doc nos hace una receta de Clomifeno para estimular la ovulación y ácido fólico.
-¿Alguna duda?
-No. Ya te pregunté todo hace como un mes. Me quedó muy claro.
Se ríe.
-Te resististe, eh.
-No seas malo -le digo cuando nos despedimos.
Una vez afuera le pregunto a él:
-¿Qué te dijo el doc cuando estaban solos?
-Que tenés unos ovarios hermosos.